La Graciosa, desconocida y maravillosa


Había tomado un vuelo de Madrid a Lanzarote pero la travesía apenas comenzaba.

Muy temprano por la mañana en Arrecife nos dirigimos a la estación de Guaguas, nombre que se le da a los autobuses en algunas Islas, en las Antillas y otras comunidades como Puerto Rico, Cuba y República Dominicana. Cabe destacar que esta es la opción más económica para desplazarse dentro de la Isla, aunque también puedes escoger rentar un coche o en su defecto utilizar el servicio de taxi.

Debimos atravesar literalmente toda la Isla hasta llegar al Puerto de Órzola, lugar donde tomaríamos el Ferry que nos llevaría finalmente al destino. Al llegar inmediatamente compramos los tickets, el mejor dato de todos es que los barcos tienen una frecuencia media de salida de 30 minutos y que los precios son muy variados, los niños y residentes canarios tienen un precio especial.

Justo ese día, el brazo de Mar que separa las Islas estaba un poco picado y el viento no estaba a nuestro favor, pero nos embarcamos sin dudarlo en el primer barco que saldría hacia La Graciosa, sino lo sabias esta Isla forma parte al archipiélago Chinijo perteneciente a la provincia de Las Palmas. 

Finalmente, luego de aproximadamente 30 minutos navegando logramos observar sus playas a lo lejos. Al llegar a la isla tuvimos la primera panorámica de su pueblo y de la conocida Caleta de Sebo, una zona característica y en la que todos los viajeros tienen una parada obligatoria.

Apenas comenzamos a caminar por sus arenas doradas nos dimos cuenta de lo poco explorado que estaba el territorio y simplemente nos maravillamos. Caminamos por un rato e hicimos una primera parada en la Playa de El Salado y posteriormente en Playa Francesa, luego de tumbarnos en la arena y darnos un baño en sus aguas pudimos observar la Montaña Amarilla -un rincón de la isla que no podrás pasar por alto- esta impresionante vista abre campo a la encantadora Playa La Cocina.

Solo puedo decirles que La Graciosa es el secreto mejor guardado de las Islas Canarias, sus paisajes volcánicos y sus playas paradisíacas harán que te enamores durante cada minuto que estés allí.


Por cierto, aún en mi bucket list está conocer la Playa de la Concha, ubicada al otro extremo de la Isla. Así que les aseguro que muy pronto les narraré mi regreso a la maravillosa y desconocida: Graciosa Island.

Por German Delgado.

Fotografías de German Delgado. La Graciosa, Islas Canarias; España.



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